De forma acumulativa, en los últimos diez años el sector del etiquetado español ha incrementado su cifra de negocio un 40%, según refleja un análisis realizado por Aifec. En este periodo, además, ha destacado la concentración del sector, que ha propiciado el aumento del peso de las empresas o grupos que facturan más de siete millones de euros al año, y que representan más del 60% del total. Además, este tejido industrial está consiguiendo mantener su producción al 94% de su capacidad a pesar de la crisis del COVID-19
La Asociación Ibérica de Fabricantes de Etiquetas en Continuo (Aifec) ha publicado un estudio sobre la situación de la industria de impresión de etiquetas en España y Portugal. Este análisis ha sido elaborado tomando como referencia los últimos datos depositados en el registro mercantil por parte de las 170 empresas más relevantes del sector.
Este documento asegura que, en España, desde 2010, esta industria ha registrado un alza acumulada del 40% con dos ciclos diferenciados: “el primero, la salida de la crisis, entre 2010 y 2013, cuando el crecimiento en la cifra de negocios fue de un 1% anual; y el segundo, de 2013 a 2019, cuando los incrementos fueron por encima del 5% hasta el 2017, para luego descender un 4% en 2018 y un 3% en 2019”, han destacado desde la entidad.
En cuanto al crecimiento del empleo, las cifras son similares, lo que significa que el sector en esta última década “ha consolidado el papel determinante de la etiqueta como elemento esencial de identificación, trazabilidad y de marketing en la venta de productos o los procesos que la utilizan”, han explicado desde la asociación.
Otra característica de este periodo en España ha sido la concentración que se está produciendo, dando lugar al aumento del peso en el sector de aquellas empresas o grupos que facturan más de siete millones de euros al año –y que supone más del 60% del total de la industria– y al descenso del número de empresas que facturan menos de tres millones al año.
Los resultados del estudio de Aifec muestran también que los resultados de las empresas han empezado a descender, cayendo a un 33% las que obtienen más de un 5% de beneficio –cuando esa cifra se situaba en el 44% en años anteriores–. Además, “las que obtienen pérdidas han subido del 5% al 9%. A pesar de este descenso en los resultados el Ebitda del sector se ha mantiene a un nivel alto, en el 13,8%, debido a la alta inversión realizada en maquinaria en los últimos años”.
En Portugal la cifra de negocios total de las empresas analizadas ha crecido en la década un 38%, con una facturación media de 3.3 millones de euros. La tendencia en el país vecino es similar a la de España: se ha tocado techo en la generación de Ebitda, con un alto porcentaje de amortización y erosión en los precios debido a la gran capacidad creada en esta década.
En la actualidad, “el sector muestra una gran fortaleza en crecimiento de facturación y creación de empleo tanto en España como en Portugal, pero está iniciando una nueva fase de descenso en el crecimiento debida a la gran competencia de precios por unos años de mucha inversión en tecnología”, han explicado desde Aifec.
Fuente: Techpress