Tener ingredientes de todo el mundo es cada vez más importantes para los comensales de hoy. Los milenials tienen los paladares más aventureros. Un 39% declaro que prefieren visitar restaurantes que ofrecen comidas y bebidas étnicas, según el Technomic’s 2016 Generational Consumer Trend Report. Pero los clientes de las generaciones Z y X no se quedan atrás, con un 31% y un 29%, respectivamente, lo que expresa el deseo de que los elementos que integran los menús de hoy provengan de todo el mundo.
Presentar ingredientes étnicos en un formato familiar es una manera efectiva para que los restauranteros introduzcan sabores del mundo en los menús convencionales. Los quesos étnicos se adaptan bien a esta estrategia. Son fácilmente intercambiables por opciones más convencionales en sándwiches de queso a la parrilla, hamburguesas con queso, quesadillas, pizzas, ensaladas y otros platillos favoritos de los clientes.
ORIGINES GLOBALES
Muchos de los quesos más populares en los menús tienen raíces étnicas. El queso Mozzarella, el parmesano, el provolone y el ricotta son originarios de Italia y el queso feta es originario de Grecia.