La agencia europea de seguridad alimentaria EFSA ha publicado el Eurobarómetro 2022 sobre seguridad alimentaria en la Unión Europea, la 4ª encuesta de este tipo que se viene realizando desde el año 2005.
Así, entre sus conclusiones principales, está la afirmación de que el costo de los alimentos tiene ahora un mayor peso en las preocupaciones de los europeos que hace unos pocos años, convirtiéndose en el principal factor que influye en la compra de los alimentos, seguido de su sabor. Cerca de la mitad considera que la seguridad alimentaria también es importante y un 41 % de los ciudadanos europeos dan por sentado que los alimentos que compran son seguros.
Estas conclusiones son resultado de entrevistas realizadas a 27,000 personas en la UE y presentan una imagen de la evolución de cómo los europeos eligen los alimentos, su conocimiento y preocupaciones sobre seguridad alimentaria y en quién confían para informarse sobre temas de seguridad alimentaria.
Los problemas globales dejan huella
El director ejecutivo de la EFSA, Bernhard Url, declaró: “Han pasado muchas cosas desde nuestra última encuesta en 2019, fundamentalmente una pandemia mundial y el estallido de una guerra en Europa. Tales eventos tienen consecuencias dramáticas e inesperadas, como era de esperar, que, como vemos, para muchos europeos suponen un aumento en el costo de la vida que afecta a sus elecciones alimentarias más que antes”.
“Por otro lado la seguridad alimentaria sigue siendo importante para la mayoría de los ciudadanos de la UE y es alentador ver que casi la mitad de ellos se preocupan por tener una alimentación saludable, así como por los riesgos alimentarios.
Seguridad alimentaria tras 20 años- Abordar los riesgos del mañana
Esta última instantánea de las opiniones de la ciudadanía se produce cuando el sistema de seguridad alimentaria de la UE, la EFSA y los organismos de seguridad alimentaria en varios Estados miembros cumplen 20 años. Fueron creados en 2002 para dar a la seguridad alimentaria en Europa una base científica reforzada, normas armonizadas y fomentar la cooperación a lo largo del continente.
El Sr. Url declaró: “Este hito es un logro para muchas organizaciones, expertos científicos y otras partes interesadas en nuestro sistema. Es alentador que dos tercios de los ciudadanos europeos reconozcan que la UE y los Estados miembros están trabajando juntos, no de forma aislada, para hacer de esto una realidad”.
“El ritmo creciente de innovación y complejidad técnica en la forma en que producimos, compramos y consumimos nuestros alimentos es otro de los motores de una cooperación fuerte entre países y entre disciplinas científicas”.
“El Eurobarómetro de 2022 también muestra que la mayoría de nuestros ciudadanos reconoce que la situación del medio ambiente, los animales y las plantas afecta la salud humana. Esto es alentador, mientras transitamos hacia sistemas alimentarios sostenibles y una evaluación de riesgos con un enfoque One Health”.
La confianza en los nuevos alimentos se mantiene firme
A su vez, siete de cada 10 europeos reconocen el papel de los científicos para garantizar que nuestros alimentos sean seguros y 8 de cada 10 confían en ellos para obtener información sobre seguridad alimentaria. Asimismo, la confianza en las instituciones nacionales y de la UE es alta, alrededor de los dos tercios.
Barbara Gallani, directora de Comunicación y Sociedad de la EFSA, declaró: “Estos hallazgos son inestimables para nuestro trabajo diario, así como para nuestra planificación estratégica a largo plazo”.
“Hemos desarrollado resúmenes personalizados y herramientas de datos para nuestros socios de los Estados miembros, por lo que pueden utilizar los resultados del Eurobarómetro para respaldar su propia información pública y divulgar la mutua labor realizada en seguridad alimentaria”.
Otros hallazgos seleccionados:
Más de un tercio de los europeos tienen un nivel muy alto (21 %) o alto (17 %) de conocimiento sobre temas de seguridad alimentaria, es decir, han escuchado hablar sobre 10 o más de los 15 temas encuestados.
Es más probable que hayan oído hablar de aditivos en alimentos o bebidas (70 %), residuos de plaguicidas en los alimentos (65 %), residuos de antibióticos, hormonas o esteroides en la carne (63 %) o enfermedades encontradas en animales (60 %).
Los residuos de plaguicidas en los alimentos (40%) y los residuos de antibióticos, hormonas o esteroides en la carne (39 %) encabezan la lista de preocupaciones relacionadas con la seguridad alimentaria entre los europeos. Menor proporción de gente estaba preocupada por las enfermedades de las plantas (11 %), el uso de nuevas biotecnologías en los alimentos producción (8 %) y nanotecnología aplicada a la producción de alimentos (5 %).
Unos 6 de cada 10 (61 %) señalan la televisión, en un televisor o a través de Internet, como una de sus principales fuentes de información sobre los riesgos alimentarios, seguida de familiares, amigos, vecinos o compañeros (44 %) y buscadores de internet (37 %), con importantes diferencias entre generaciones.
Más de 8 de cada 10 encuestados confían en los profesionales de la medicina (89 %), de la ciencia financiados con fondos públicos de universidades (82 %) y organizaciones de consumidores (82 %) para obtener información sobre los riesgos alimentarios.
Una minoría de europeos no cambiaría su comportamiento en caso de alerta alimentaria (21 %). Entre las razones principales dadas, incluyeron la preparación de alimentos según la forma recomendada (45 %), y la creencia de que todos los alimentos implican algún riesgo y que resulta imposible evitar todos los riesgos (25 %).
Fuente: Eurocarne