La salud es un concepto holístico que involucra a todos los sistemas que conforman nuestros cuerpos, así como el entramado social y el entorno que nos rodea. Esta idea cobra cada vez mayor fuerza y los habitantes de todo el mundo en este siglo xxi buscan las experiencias, las comodidades, los cuidados y alimentos que brinden salud, en el pleno sentido de la palabra. Los alimentos son la energía que da vida a los motores de nuestro cuerpo, y sin duda hay toda clase de «combustibles» con los cuales podemos alimentarnos, pero no todos son nutritivos. Hay comida que ayuda a ciertos componentes de nuestro cuerpo a desarrollarse de forma óptima; hay otra que es energía pura, y hay alimentos que, aunque su sabor sea muy bueno, realmente no agregan valor para nuestras actividades diarias.
La ciencia alimentaria se ha encargado de investigar aquellos alimentos que por sus características han demostrado contribuir positivamente a la salud. En esta línea, Beneo tiene cerca de veinte años siendo líder en innovación en el tema de los ingredientes funcionales naturales. Alfa Editores Técnicos tuvo la oportunidad de platicar con Renata Càssar, quien se desempeña como Manager Nutrition Communication de la empresa para el sector de Latinoamérica. Renata nos brindó muchos más detalles de cómo los prebióticos de Beneo pueden ayudar en una amplia gama de ámbitos a los consumidores finales de productos que los contengan.
Renata resaltó que Beneo fue uno de los pioneros en la industria en la materia de los prebióticos. En el año 2017, ISAPP (Asociación Científica Internacional para Probióticos y Prebióticos, por sus siglas en inglés) estableció que para que un ingrediente pueda denominarse prebiótico tiene que demostrar una estimulación beneficiosa de la microbiota intestinal y, además, brindar un beneficio a la salud. Al momento, sólo se ha comprobado que tres ingredientes producen dichos resultados: la inulina, la oligofructosa y el galacto oligosacárido, siendo únicamente las dos primeras de origen vegetal. Desde hace más de veinte años, Beneo ha trabajado con la inulina y la oligofructosa provenientes de la raíz de achicoria. «No todos los productos que se dicen prebióticos lo son realmente, pero de los tres ingredientes considerados prebióticos probados, tenemos dos: la inulina y la oligofructosa. Son ingredientes innovadores y van muy de la mano con los intereses del mercado, con lo que buscan los consumidores, pues aportan distintos beneficios, entre ellos, por supuesto, la parte de control de peso corporal».
Los prebióticos de Beneo pueden ser una gran herramienta a la hora de luchar contra problemas de salud importantes como el sobrepeso y la obesidad que, en particular en México, afectan a una parte considerable de la población. Como nos explicó Renata, lo que los ingredientes de la raíz de la achicoria como la inulina o la oligofructosa agregan a los alimentos es fibra, que también son carbohidratos pero no digeribles por el tracto gastrointestinal. «En primer lugar, las fibras apoyan en cuestiones de control de peso porque pueden reemplazar a los azúcares y a las grasas, aportando muchas menos calorías, entre algunos de sus beneficios. Además, hay también estudios que han demostrado que su efecto prebiótico comprobado puede desencadenar otros mecanismos para apoyar la pérdida de peso o el mantenimiento de un peso corporal saludable. Por ejemplo, algunos estudios que hemos realizado en el Beneo-Institute han probado efectivamente que la fibra ayuda a aumentar la saciedad, al trabajar con la parte hormonal encargada de esta función, lo cual puede conducir a una disminución en la cantidad de alimentos ingeridos y, como resultado, conduce a la ingesta de menos calorías», explicó Renata, quien es nutrióloga de profesión.
La achicoria es una planta que crece con gran abundancia en la zona mediterránea y que desde hace mucho tiempo los seres humanos la han usado con diferentes funciones medicinales, por ejemplo: desintoxicante, para estimular el correcto funcionamiento del hígado, para aliviar problemas digestivos. Su función como prebiótico, en los ingredientes de inulina y oligofructosa Orafti de Beneo, viene de las fibras de la raíz de esa planta, y se da al estimular selectivamente los microorganismos, por ejemplo, las bifidobacterias y los lactobacilos que contribuyen a mantener una microbiota saludable, esto es, que la salud gastrointestinal sea óptima. Sobre la gran cantidad de estudios que en su trayectoria ha llevado a cabo la empresa, Renata nos platicó contenta: «No sólo se trata de estimular una microbiota beneficiosa, sino que de ahí se derivan muchos complementos para la salud. Nuestras investigaciones se han dedicado a una amplia variedad de enfoques, por supuesto uno de los pilares es la parte del control de peso, pero también hemos comprobado beneficios en las cantidades de glucosa e insulina en sangre hasta conducir a niveles compatibles con un metabolismo saludable. Asimismo, una microbiota en óptimo estado puede apoyar en la salud ósea, al aumentar la absorción de minerales como el calcio. Con investigaciones más recientes hemos visto que la fibra de raíz de achicoria puede apoyar, a su vez, en aspectos de la salud mental, en cuestiones como el estado de ánimo, mejorar las puntuaciones de ansiedad, depresión, sentimientos negativos, mientras impulsan los positivos. En este mismo estudio se apreció que a través de las fibras de la raíz de achicoria se obtuvo una mejor repuesta a la hormona cortisol, más baja, y esta hormona se relaciona con el estado de estrés. La investigación ha probado su funcionamiento y para nosotros son muy importantes los estudios en esta área, en lo que llamamos el eje intestino-cerebro, algo muy nuevo y prometedor».
Renata Càssar de Beneo recalcó un tema muy importante: no se puede cambiar por completo una dieta de un momento a otro, es una estrategia a largo plazo y también involucra que la comida es un placer, debe ser rica y nutritiva. «En el caso del prebiótico de la raíz de la achicoria sabemos que puede reemplazar azúcares, grasas, el contenido calórico, al tiempo que mantienen el sabor, iguala la textura, o hasta pueden mejorarla, lo cual conduce a una reformulación de los productos con estos ingredientes, o el desarrollo de nuevos productos que se puedan posicionar con estos elementos a favor de la salud. Los consumidores ahora buscan invertir en ingredientes que generen resultados positivos a la salud. La fortificación con fibra aporta muchos beneficios, y en ningún lugar del mundo se consume la cantidad diaria recomendada de fibra. La fibra prebiótica de Beneo aporta los numerosos beneficios que ya mencioné y, además, también contribuye a la salud inmunológica, puesto que 70% de las defensas corporales se encuentran en el intestino, por lo cual tener una microbiota saludable impacta en diferentes ámbitos de nuestro cuerpo».
Por supuesto, el consumidor es quien tiene la palabra final. Además de todos los trabajos científicos desarrollados por Beneo en su innovador Beneo-Institute, también trabajan escuchando a los consumidores y por ello han realizado distintos trabajos. Sobre ellas nos habló Renata, en especial una encuesta llevada a cabo el año pasado en nuestro país, con aproximadamente mil entrevistados, que arrojó estos resultados: los consumidores de México han oído hablar de los prebióticos, el 42% ha oído hablar de los prebióticos y sabe lo que son, y otro 47% han oído hablar de los prebióticos sin saber exactamente lo que son. 72% de estos consumidores relaciona estos prebióticos con la salud digestiva, y 61% considera que sería interesante tener un claim, quizá alguna distinción en los empaques que ponga en evidencia los beneficios que puede aportar al ser ingerido.
«Sabemos que todo empieza con pocos consumidores, esto irá conduciendo a un crecimiento masivo y, a la larga, a la democratización de los precios; aunque tenemos la certeza que la convicción del consumidor de buscar un estilo de vida más nutritivo y saludable prevalecerá sobre los precios. Es algo posible, podemos hacerlo trabajando en conjunto. Al tiempo que las industrias de alimentos y bebidas son invitadas por organismos como la OMS a cambiar sus portafolios para reducir ingredientes negativos como el azúcar, estamos las empresas que hemos apostado por la innovación y tenemos las soluciones. Mi trabajo es comunicar a nuestros clientes todos los beneficios a la salud que pueden aportar las fibras prebióticas, y demás ingredientes de Beneo, al ser agregados a sus desarrollos. Gracias al Beneo-Institute y a nuestra fuerte colaboración con distintos expertos en todo el mundo en el área de fibras, microbiota, microbioma, contamos con las investigaciones científicas que nos respaldan. Desde mi perspectiva, tenemos una gran oportunidad a futuro en el área del eje intestino-cerebro, creo que podemos explorar muchas cosas en ese sentido y continuar ofreciendo alternativas que permitan a los consumidores llevar una alimentación equilibrada, saludable, que contribuya a su salud en muchísimas formas».
Fuente: Beneo
