Una nueva biorrefinería en Zambrana (Álava) tratará los residuos generados por el sector vitivinícola vasco (orujas, lías, vino y raspón) para la obtención de diferentes productos destinados a usos industriales, energéticos, alimentación humana o animal.
El proyecto, en el que se van a invertir unos 25 millones de euros, se presentó en Vitoria de la mano de su promotora, Destilerías y Bio-refinerías Zambrana S.A, con Pepe Vadillo de Grupo Vadillo Asesores como coordinador, Iñaki Isasi como director del proyecto y Patxi Antón como director general.
En estos momentos, la planta se encuentra en construcción en Zambrana, una pequeña localidad cercana a la Rioja Alavesa.
La planta trabaja ya con el centro tecnológico Azti para aprovechar el raspón de uva –la estructura leñosa que soporta los granos– en la producción de bioetanol –unas dos mil toneladas al año– y piensos animales.
La nueva planta nace con la intención de utilizar tecnología moderna y eficiente, incluida la recuperación de energía, de forma que se podrá asegurar a las empresas vitivinícolas que sus residuos han sido tratados sin impacto medioambiental alguno, incluida una certificación de cero emisiones.
Fuente: Interempresas
