Pese a que todavía existe inconformidad entre productores de bebidas alcohólicas por la Norma Oficial Mexicana 199 (NOM-199), publicada el pasado 30 de octubre y con la que se establecen las denominaciones, especificaciones fisicoquímicas, la información comercial y los métodos de prueba que deben cumplir, hay recursos económicos de diversas dependencias federales, así como programas de asesoría y capacitación, para que logren obtener la certificación de sus productos y transiten a la economía formal; aseguraron César Fragozo López, jefe de la Unidad de Desarrollo Sectorial de ProMéxico, y Álvaro Burgos Barrera, secretario de Fomento y Desarrollo Económico de Guerrero.
“Al final de día, el mezcal u otras bebidas alcohólicas no van a desaparecer ni los productores van a dejar de hacer lo que han hecho toda su vida. Vamos a ayudarles precisamente a que cumplan con esa norma. Esa es la función del gobierno: asesorarlos, acompañarlos, orientarlos y en algunos casos también apoyarlos con recursos federales”, expresó Burgos Barrera.
Guerrero es el segundo productor de mezcal más importante de México, y el año pasado generó un millón 700 mil litros de dicha bebida, sólo es superado por Oaxaca, indicó. Sin embargo, 70 por ciento de los 800 productores de dicha bebida trabajan en la informalidad, pero es una proporción que predomina en diversos sectores productivos ya que la informalidad registrada en Guerrero es una de las más altas del país, abundó.
Fragozo López señaló que se debe cuantificar el impacto económico que la norma generará entre los productores, y dijo que desde hace mucho tiempo ProMéxico otorga apoyos económicos para la certificación de productos y el cumplimiento de normas.
El miedo a la formalidad es sobre todo por el pago de impuestos, pero además de los recursos de ProMéxico, también hay de la Secretaría de Agricultura y del Instituto Nacional del Emprendedor (Inadem) para ayudar a los productores de bebidas y destilados a dejar la informalidad, señaló el funcionario.
“Sí hay algunos desacuerdos con la norma, pero nosotros estamos buscando e incentivando que todos los productores se formalicen y se den cuenta que con esta norma pueden llegar a mercados internacionales, donde se establecen esas exigencias. Si se da una demanda para comercializar sus bebidas, lógicamente los productores verán el beneficio y la importancia de la norma”, señaló el delegado de la secretaría de Economía en Guerrero, Fernando Jesús Meléndez Cortés.
El mezcal registra una tasa de crecimiento del 35% anual en el mundo, “y por eso es una gran oportunidad para los productores guerrerenses”, abundó Burgos. Hasta ahora 85% de la producción total de mezcal en Guerrero se destina al mercado interno, y únicamente el restante 15 por ciento se exporta, principalmente a Estados Unidos, pero también a países nórdicos y asiáticos.
Los funcionarios anunciaron además una rueda de negocios de bebidas y destilados en Acapulco, del 3 al 5 de diciembre, en la que se espera la participación de 120 productores mexicanos y de 40 compradores internacionales, así como 1,400 reuniones de negocios entre ellos, para que además del mezcal y el tequila se posicionen otras bebidas representativas del país, como la raicilla, sotol, bacanora, así como cervezas y vinos artesanales.
Será la cuarta rueda de negocios de este tipo que organiza ProMéxico en el año, y aunque Fragozo señaló que es difícil calcular qué derrama económica dejará, mencionó que en la que se realizó en Campeche generó negocios por 8 millones de dólares.
Las nuevas generaciones en el mundo comenzaron a consumir más tequila que las anteriores y, con ello, también impulsaron la demanda de mezcal, que se ha convertido en una bebida “de moda”, dijo Fragozo, y refirió que, de acuerdo con Euromonitor, México es uno de los 10 principales productores de las llamadas “bebidas espirituosas”.
Cifras oficiales indican que las bebidas alcohólicas representaron 16 por ciento del total de las exportaciones agroalimentarias que realizó México durante 2016, año en que se consolidó como el principal exportador de cerveza a nivel global.
Fuente: La Jornada
