El efecto de los alimentos sobre la salud del corazón no depende solo de su influencia sobre los niveles de colesterol. Un estudio publicado en el Journal of the American College of Cardiology detalla cuáles son los alimentos antiinflamatorios que se asocian con niveles bajos de biomarcadores inflamatorios como interleucinas, quimiocinas y moléculas de adhesión, que se asocian con etapas tempranas y tardías de la aterosclerosis y, por tanto, de muchas enfermedades cardiovasculares.
Existe relación entre alimentos, inflamación y enfermedad cardiovascular
Los investigadores utilizaron los datos de hombres y mujeres participantes en los denominados “Estudios de salud de enfermeras I y II”, que recabaron información sobre hábitos alimentarios y salud durante 32 años. Después de excluir participantes en los que faltaba información sobre la dieta o que habían sufrido previamente enfermedades cardíacas, accidentes cerebrovasculares o cáncer, se incluyeron finalmente en el análisis más de 210,000 participantes. Estas personas habían completado una encuesta cada cuatro años sobre su ingesta dietética.
La doctora Jun Li, autora principal del estudio e investigadora científica del departamento de nutrición en la Escuela Chan de Salud Pública en la Universidad de Harvard, explica que “nuestro estudio es uno de los primeros en vincular un índice inflamatorio dietético, basado en los alimentos, con el riesgo a largo plazo de enfermedad cardiovascular”.
El índice dietético proinflamatorio basado en alimentos se basa en 18 grupos de alimentos que, en conjunto, muestran las asociaciones más fuertes con un aumento de biomarcadores inflamatorios.
Después de controlar otros factores de riesgo como el índice de masa corporal, la actividad física, los antecedentes familiares de enfermedad cardíaca y el uso de multivitaminas, los participantes que consumían dietas proinflamatorias tenían un riesgo un 46% mayor de enfermedad cardíaca y un riesgo un 28% mayor de accidente cerebrovascular, en comparación con los que consumían alimentos antiinflamatorios.
Los alimentos naturales más antiinflamatorios
En cambio, los investigadores señalan que consumir alimentos con niveles altos de antioxidantes y fibra ayuda a combatir la inflamación. Estos alimentos son: verduras de hoja verde (col rizada, espinaca, repollo, rúcula), hortalizas amarillas y anaranjadas (calabaza, pimientos amarillos, frijoles, zanahorias), Cereales integrales, café, té y vino.
Comer nueces cada día reduce la inflamación
Otro estudio, realizado por el Instituto de Investigaciones Biomédicas August Pi i Sunyer en Barcelona, y publicado también en el Journal of the American College of Cardiology, prueba que la incorporación de nueces a la dieta disminuye la inflamación y el riesgo de enfermedades cardíacas.
Los investigadores españoles evaluaron cómo la incorporación de nueces en la dieta habitual mejora los biomarcadores inflamatorios. Un total de 634 participantes siguieron durante dos años una dieta con 30-60 g de nueces al día. Después se les realizaron análisis que mostraron niveles significativamente reducidos de inflamación en el cuerpo en 6 de cada 10 de los biomarcadores inflamatorios probados.
El efecto antiinflamatorio a largo plazo del consumo de nueces proporciona una nueva perspectiva sobre su beneficio en relación con el riesgo de enfermedad cardiaca más allá de la reducción del colesterol, explica la doctora Montserrant Cofán, autora principal del estudio.
Para subrayar la importancia de los dos estudios que relacionan los alimentos antiinflamatorios con la salud cardiovascular, el Journal of the American College of Cardiology publica un comentario editorial de los doctores Ramon Estruch, Emilio Sacanella y Rosa M. Lamuela-Raventós, investigadores de la Universidad de Barcelona y miembros del grupo CIBER Obesidad y Nutrición, coordinado por el Instituto de Salud Carlos III de Madrid, donde afirman que “una mejor comprensión de las propiedades antiinflamatorias de ciertos alimentos proporciona las bases para diseñar patrones dietéticos más sanos que protejan frente a la enfermedad cardiaca”.”¡Al elegir alimentos, debemos ser conscientes de su potencial proinflamatorio o antiinflamatorio!”, rematan.
Fuente: Cuerpo Mente