Un estudio presentado recientemente en la reunión anual de la Sociedad Europea de Cardiología, encontró que beber café por las mañanas es un hábito que ayuda a reducir el riesgo de muerte prematura por enfermedad cardíaca y accidente cerebrovascular. Es importante recalcar que estas últimas son consideradas dos de las cinco principales causas de muerte en los Estados Unidos, según los Centros para Control y prevención de enfermedades.
El estudio fue bastante relevante, en gran parte por su magnitud ya que se enfocó en analizar los hábitos dietéticos de casi 469,000 personas. Este trabajo de investigación se enfocó en revelar tres posibles beneficios más del consumo regular de café.
El equipo de investigación accedió a datos de la base de datos de salud del Biobanco del Reino Unido para un estudio que, según el autor principal, “es el estudio más grande para evaluar sistemáticamente los efectos cardiovasculares del consumo regular de café en una población sin enfermedad cardíaca diagnosticada”.
Cabe mencionar que la edad media de los participantes fue de 56 años y más de la mitad, es decir el 55.8% eran mujeres. Lo cierto es que a estas alturas todos estamos familiarizados con la creciente evidencia que avala los beneficios terapéuticos del consumo mesurado de café: protege al hígado, reduce el riesgo de desarrollar diabetes, interviene positivamente en la pérdida de peso, aumenta el rendimiento físico y protege al corazón. De tal modo que resulta fascinante que la lista de bondades vaya en incremento.
De acuerdo con la autora del estudio, la Dra. Judit Simon del Heart and Vascular Center de la Universidad Semmelweis de Hungría: beber de media taza a tres tazas de café por día se asocia de forma independiente con una significativa disminución del riesgo de tres importantes aspectos relacionados con la salud cardíaca: menor accidente cerebrovascular, muerte por enfermedad cardiovascular y muerte por cualquier causa.
Dentro de los hallazgos más relevantes, los investigadores detectaron que los bebedores de esa cantidad de café vieron un 12% menos de riesgo de muerte prematura por cualquier causa, así como un 17% menos de riesgo de muerte por enfermedad cardiovascular y un 21% menos de riesgo de accidente cerebrovascular incidente.
Lo mejor de todo es que se trata del estudio más grande y relevante sobre la relación entre el consumo de café y la salud cardíaca, del que se tiene registro hasta el momento. Para ayudar a explicar por qué el café puede ayudar a prevenir enfermedades cardíacas, accidentes cerebrovasculares y la muerte prematura en general, la Dra. Simon informó que su equipo se dio a la tarea de analizar la resonancia magnética de más de 30,000 participantes.
Por lo tanto, con base en dichas lecturas concluyeron: “El análisis de imágenes indicó que, en comparación con los participantes que no tomaban café con regularidad, los consumidores diarios tenían corazones de tamaño más saludable y mejor funcionamiento. Además, esto era consistente con revertir los efectos perjudiciales del envejecimiento en el corazón”.
Sobre las posibles razones, los investigadores enfatizan las propiedades cardioprotectoras del café y que se relacionan activamente con su contenido en antioxidantes. Vale la pena sumar los hallazgos de un reciente estudio realizado por el National Institute of Health (NIH) de Estados Unidos, que se enfocaron en derribar la creencia acerca de que el consumo del café es perjudicial para la salud. Publicado en la prestigiosa revista New England Journal of Medicine, el estudio analizó a grupo de más de 400,000 personas de entre 50 y 71 años durante un período de 14 años. Los hallazgos fueron contundentes: aquellas personas que consumían café a diario reducían su riesgo de muerte por enfermedad cardiovascular, respiratoria, ictus, diabetes, infecciones y lesiones. De hecho, el análisis observó que el café tenía propiedades protectoras en la mayor parte de enfermedades menos en los tumores, revelando que las personas que bebían no más de cuatro tazas de café al día reducían en un 14% su riesgo de muerte.
En la misma línea, otro estudio publicado en la revista de la American Heart Association (AHA) Circulation Heart Failure, confirma el efecto cardioprotector del café, ya que lo asocia a una disminución del riesgo a desarrollar insuficiencia cardiaca. Sin embargo, reconoce que existe un límite de consumo que, una vez sobrepasado, puede ocasionar algunos efectos negativos y aumentar el riesgo de afecciones cardiovasculares e hipertensión. Los expertos coinciden en que gran parte de los beneficios cardiovasculares relacionados con el consumo de café, se deben directamente a su contenido en poderosos antioxidantes.
De acuerdo con un estudio publicado en The Americal Journal of Clinical Nutrition, el café ocupa el sexto lugar en la lista de los 50 alimentos que contienen más antioxidantes, después de las moras, las nueces, las fresas, las alcachofas y los arándanos. Su aporte de polifenoles, antioxidantes naturales, protege al organismo contra la oxidación celular y los posibles daños provocados por los radicales libres.
Lo cierto, es que actualmente se cuenta con numerosos estudios de gran valor, en los que se ha sugerido que un consumo de café de ligero a moderado es un objetivo saludable para los bebedores diarios. Finalmente, además de ser una deliciosa costumbre, se relaciona con excepcionales bondades que mejoran la salud, previenen enfermedades y sobre todo alargan la esperanza de vida.
Fuente: El Diario NY