En medio del auge por la sidra se suma un nuevo jugador con producción 100% en la Patagonia. Apuntan a desarrollar 150,000 litros en el año. Lo hacen de la mano de la marca de cervezas Rabieta.
La sidra fue históricamente una bebida relacionada con Navidad y Año Nuevo. Pero, poco a poco, su consumo fue desestacionalizándose. Por eso, los principales jugadores del mercado lanzan productos pensados para los 365 días del año.
A la lista se suma ahora una nueva sidra premium de la mano de la marca de jugos naturales Pura Frutta y la cerveza artesanal Rabieta. Se trata de Becider, una bebida que acaba de llegar al mercado con una particularidad: apunta a un público femenino.
“Pura Frutta se creó en 2014, desde ese momento su crecimiento fue exponencial a pesar del contexto difícil y las diferentes adversidades. Si bien hoy contamos con siete sabores de jugos, la esencia de nuestra marca es la manzana, por eso caía de maduro que íbamos a incursionar en la industria de la sidra”, explica en una entrevista con El Cronista Martín Carro socio de Pura Frutta.
Si bien la marca ya había intentado involucrarse en el negocio de la sidra en 2016, recién el año pasado pudo materializarse el proyecto. “Hace dos años nos mudamos de planta luego de un acuerdo con Grupo Prima (dueños de Moño Azul) paralelamente conocimos a la gente de Rabietta y surgió la posibilidad de hacer algo en conjunto”, explica.
Hoy la sidra se hace en la planta de Pura Frutta en el Alto Valle de Rio Negro con la misma manzana con la que se hacen los jugos. Rabietta se encarga del envasado y la gasificación del producto. “Por ahora la presentación que lanzamos es en lata, porque justamente queremos instalar la bebida como un producto para tomar todo el año”, agrega el empresario.
La primera producción se envasó el pasado 10 de diciembre “trabajamos contra reloj para llegar a diciembre cuando es el mes de consumo alto de sidra y no haber llegado no nos preocupa, porque creemos que es un producto que se toma en cualquier momento del año”, resalta.
En diciembre se produjeron 10,000 litros de sidra, lo que equivale a un total de 20,000 latas de 473 ml. “El objetivo en el año es alcanzar una producción de 150,000 litros”, detalla el empresario oriundo de Rio Negro.
Se trata de un producto premium. “Estamos entrando a los diferentes canales de comercialización. El objetivo por ahora está puesto en el mercado local”, dice.
Desde la marca de jugos naturales aseguran que las inversiones no fueron grandes en materia del nuevo lanzamiento, aunque reconocieron que el exponencial crecimiento de la empresa los obligó a invertir en nuevas maquinarias para incrementar la capacidad productiva.
Sidra, Nuevos jugadores
Según los últimos datos el Weston Cider Report -elaborado por la homónima fabricante británica de sidras-, en la actualidad, la Argentina registró 82 millones de litros anuales de consumo interno.
La marca sale a competir con Cervecería y Maltería Quilmes que a fines del año pasado comenzó a comercializar las versiones Demi Sec, Dolce y Pera de Sidra 1930.
También lo hará con la marca de Cerveza Patagonia, también del grupo Quilmes, que lanzó al mercado a Isidra, una sidra frutada de edición limitada que se puede consumir en lata de 473 centímetros cúbicos.
A la lista de nuevos lanzamientos se suma el de su socio Moño Azul quienes incursionaron con su propia marca de sidra en su presentación botella y lata.
En 2010, la cervecera chilena CCU, adquirió Sáenz Briones, dueña de las marcas 1888, Victoria y Real. En ese momento, pagó u$s 12.5 millones por activos que le aseguraron una participación del, por lo menos, 50% del negocio local. Desde entonces, CCU concentró sus esfuerzos en desestacionalizar el consumo de la categoría, fuertemente asociado con las fiestas de Navidad y Fin de Año. La etiqueta insignia de esa cruzada, 1888, tiene crecimientos anuales de doble dígito en volumen, según datos del grupo chileno.
Fuente: Cronista (Negocios)