El estudio señala que el ácido fólico, especialmente abundante en la cerveza, es muy importante para la formación del feto, y se debe consumir en altas dosis antes del embarazo.
Una dieta de alimentos y bebidas con altas dosis de folatos, acompañada de suplementos de ácido fólico (vitamina B9), “es importante para la correcta formación del feto en el embarazo”. Este es uno de los datos recogidos en el documento ‘El papel del ácido fólico en el embarazo’, elaborado conjuntamente por el Centro de Información Cerveza y Salud (CICS) y la Sociedad Española de Ginecología y Obstetricia (SEGO), y que se presentó en la Clínica San Miguel de Pamplona, España.
Las mujeres que desean quedar embarazadas y las que ya lo están, “deben asegurar las dosis apropiadas de ácido fólico en su cuerpo para garantizar la correcta formación del tubo neural del feto. Se debe empezar a tomar un mes antes de buscar el embarazo, ya que la salud del tubo neural del feto se define en gran medida durante las 4 primeras semanas de gestación”, señaló Tirso Pérez Medina, autor del documento y vicepresidente de la Sociedad Española de Ginecología y Obstetricia.
Existen alimentos y bebidas que aportan una importante cantidad de folatos. Los frijoles, el hígado de ternera, las semillas de girasol, los garbanzos y las espinacas son las principales fuentes de ácido fólico. En cuanto a las bebidas, el jugo de naranja natural y la cerveza sin alcohol encabezan la lista de las que podrían aportar una mayor cantidad de esta vitamina.
Cerveza sin alcohol para el embarazo
En este sentido, Pérez Medina ha remarcado que “la cerveza es una de las bebidas que contiene más ácido fólico”. “La ingesta de una botella (250 mL), siempre sin alcohol durante el embarazo, podría aportar el 7.5% de la cantidad diaria recomendada de la vitamina en embarazadas”, ha apuntado.
La cerveza sin alcohol está elaborada con los mismos ingredientes naturales que la cerveza tradicional (agua, cebada y lúpulo), a la que se le ha suprimido el alcohol. Aporta fibra soluble y minerales, apenas tiene calorías (17 kcal/100 mL) y “es una alternativa para las mujeres consumidoras habituales de cerveza que están en estado de gestación o en periodo de lactancia”, ha destacado en un comunicado el Centro de Información Cerveza y Salud, que ha señalado que el ácido fólico es una vitamina del grupo B, hidrosoluble, cuyas cantidades sobrantes salen del cuerpo a través de la orina. Esto significa que el cuerpo no almacena el ácido fólico, “lo que hace necesario que se ingiera de forma regular en los alimentos que se consumen”.
Según la Sociedad Española de Ginecología, la ingesta diaria recomendada de ácido fólico en mujeres es de 200 microgramos (mcg)/día, entre 400 y 800 mcg/día si están planeando quedar embarazadas o si ya lo están, y 300 mcg/día si están en período de lactancia. Una dieta apropiada puede aportar alrededor de 250 mcg/día de folatos.
“Una ingesta deficiente de la vitamina podría ocasionar durante el embarazo defectos del tubo neural del feto (malformaciones del sistema nervioso central, como la espina bífida)”, pero “con el aporte adecuado de ácido fólico, se reduce el riesgo de estas alteraciones en un 70 por ciento”, agrega.
Además de tener un papel importante durante el embarazo, el ácido fólico “es esencial para el sistema nervioso y la regeneración de las células, que ayuda también a regular los niveles de homocisteína, factor de riesgo en enfermedades cardiovasculares”.
Fuente: Navarra.com