El Banco Interamericano de Desarrollo (BID) anunció que, en coordinación con diversas empresas del sector privado, gobiernos locales e instituciones aliadas se lanzó una plataforma llamada “#SinDesperdicio”, cuyo objetivo es combatir tanto el desperdicio como la pérdida de alimentos en la región de América Latina y el Caribe (ALC). Los pilares sobre los que dicha plataforma se erige son: innovación, política pública, conocimiento y comportamiento.
“La plataforma #SinDesperdicio se alinea con los Objetivos de Desarrollo Sostenible, cuya meta apunta a reducir a la mitad el desperdicio per cápita de alimentos y reducir las pérdidas en las cadenas de producción y distribución para el año 2030”, informó Julie Katzman, vicepresidenta ejecutiva del BID. Del mismo modo agregó que: “Alcanzar estas metas requiere de un esfuerzo de todos. Esta plataforma de socios representa un punto de partida para reducir las pérdidas y desperdicios de alimentos, una agenda fundamental para cumplir nuestro objetivo de mejorar las vidas de los latinoamericanos y caribeños”.
Diversas compañías del sector alimenticio, tecnológico y de la industria del empaque como Dow, Grupo Bimbo, IBM, Oxxo, Fundación FEMSA, Nestlé y The Coca Cola Company, así como la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura, la Red Global de Bancos de Alimentos, el Consumers Goods Forum (CGF) y el World Resources Institute, forman parte de este esfuerzo para reducir tanto la pérdida como el desperdicio de alimentos en la región.
Sobre la oportunidad que para Dow representa participar en esta plataforma, Juan Contreras, Director de Ventas de plásticos y empaques especiales para La Región Andina, Centroamérica y el Caribe de Dow comentó: “En Dow nos sentimos orgullosos de colaborar con el Banco Interamericano de Desarrollo y en alianza con el sector privado, gobiernos y sociedad civil, en la plataforma #SinDesperdicio para contribuir desde la Industria del empaque con la reducción de este serio problema. Es evidente que nos enfrentaremos al reto de proveer alimentos a más personas de un modo más sustentable, buscando minimizar significativamente la pérdida y el desperdicio de los alimentos en su cadena de valor. En Dow estamos convencidos de trabajar en colaboración para desarrollar soluciones sólidas que permitan un mayor desarrollo económico, así como un impacto positivo tanto en el medio ambiente, como en las comunidades y en otras cadenas de valor estratégicas relacionadas con la cadena de alimentos, ya que sólo así se logrará una verdadera y sostenida transformación”, aseguró Contreras.
De acuerdo con las cifras del BID, más de 127 millones de toneladas de alimentos, que equivalen a 223 kilogramos por persona al año, es la cantidad que se desperdicia anualmente.
En América Latina y el Caribe existen grupos de alimentos como frutas y hortalizas, en los que se registran pérdidas superiores al 50% a lo largo de la cadena. Por ejemplo, durante la producción de este grupo de alimentos se pierde un 28% del mismo, mientras que en la etapa de manejo y almacenamiento se registra un desperdicio del 21%; el 6% de la pérdida ocurre durante la distribución para que finalmente el 17% del desperdicio se dé durante la comercialización de estos alimentos. A nivel general, durante el consumo de frutas y hortalizas, particularmente en los hogares, se pierde el 28% de los alimentos producidos. El problema alcanza mayores dimensiones cuando se considera que en esta región hay cerca de 42 millones de personas que padecen hambruna.
Por otra parte, el desperdicio de alimentos también es un tema con impacto ambiental ya que se estima que, en el mundo, el 18% de las tierras productivas y el 19% de los fertilizantes se utilizan en producir alimentos que nunca se consumen.
En cuanto a los cuatro ejes en los que la plataforma se enfoca, en cuestión de innovación, los procesos y tecnologías de la cadena de producción serán impulsados en su totalidad, partiendo de la infraestructura que mejore aspectos de la logística y el empaque, hasta modelos novedosos de recuperación de donación de alimentos. En el rubro de políticas públicas, se promoverá la adopción de estándares de etiquetado, así como de normativas e incentivos para las donaciones de alimentos y programas nacionales y de reducción de PDA (pérdida y desperdicio de alimentos). Por su parte, el enfoque de conocimiento promoverá ampliar la información existente sobre las causas de la pérdida y el desperdicio, así como los niveles que estos presentan. Mediante campañas de sensibilización y capacitación orientadas a minimizar el desperdicio de alimentos entre productores, distribuidores y consumidores, se fortalecerá el enfoque de los cambios en el comportamiento enfocados a ejercer un consumo responsable.
Fuente: Parlamentario