Por tiempo limitado, la cadena de heladerías Baskin-Robbins ofrecerá su versión de la tradicional mangonada como una oda a este postre mexicano.
Esta bebida que combina el mango, el chamoy y el Tajín, lleva una sensación de nostalgia para aquellos que crecieron en México y compraban la suya en la tiendita o en la casa de la señora de la esquina, y ofrece un sabor que conecta con sus raíces a una nueva generación.
Este es el caso de Héctor Ruiz, de 29 años, propietario de dos franquicias Baskin-Robbins en San Diego y quién formó parte del proceso de degustación. Para este comerciante era importante que el sabor se asemejara a las mangonadas que encontraba al sur de la frontera cuando era niño.
“Sí me hace recordar lo que es la mangonada que conocí en Tijuana, y la razón es por los ingredientes, porque los que usamos sí son auténticos”, consideró Ruiz.
Tradicionalmente, las mangonadas —también conocidas como mangoneadas o chamangos—, pueden encontrarse como bebida, raspado, hielitos o paletas de hielo. En esta versión, se ofrece como bebida y puede adquirirse en tres tamaños.
“Esto es nuestro tributo a la mangonada, es una manera de celebrar la cultura de nosotros, los latinos”, dijo. “Es una combinación de lo dulce y tropical del mango junto con lo agridulce del chamoy y el Tajín”.
En 2018, Ruiz adquirió dos franquicias en el condado, una sobre Palm Avenue en Imperial Beach y la segunda, sobre Clairemont Drive en San Diego.
“Cuando yo era chiquito, mi familia y yo emigramos a Estados Unidos. Después de la escuela, mi mamá nos llevaba a mí y a mi hermanita a agarrar una nieve, era como una tradición que teníamos”, recuerda.
De cierta forma, esta bebida le evoca a aquellos tiempos en que se reunía con su familia para degustar un postre.
De ahí tuvo el sueño de tener un negocio “que hiciera feliz a la gente”, y para cumplirlo, reunió sus ahorros como maestro de preparatoria en la Chula Vista Learning Community Charter School.
El año pasado San Diego fue la primera y única ciudad a nivel nacional en agregar la mangonada a su menú para ver si era del agrado de los consumidores. Tras los resultados, en abril pasado llegó por tiempo limitado a todas las heladerías de esta compañía en Estados Unidos.
“Estamos emocionados de compartir la mangonada con todos nuestros huéspedes y honrar la cultura de muchas de las comunidades a las que servimos”, dijo en un comunicado Shannon Blakely, vicepresidenta de Marketing y Gastronomía con Baskin-Robbins.
Por su cercanía con la frontera y la gran concentración de inmigrantes mexicanos en esta región es más común encontrar mangonadas en fruterías y otros comercios, pero Ruiz nota, ese no es el caso en otras ciudades del país.
La compañía, dijo, pasó dos años perfeccionando la receta para llevar el “auténtico sabor de esta bebida mexicana”.
Hasta el 18 de abril, quienes pidan una mangonada a través de la aplicación DoorDash tendrán un descuento de 5 dólares en su pedido de 15 dólares o más.
Fuente: The San Diego Union Tribune
