Hay muchas maneras de diseñar u optimizar los envases para que sean más sostenibles, por ejemplo, haciendo que sean fácilmente reciclables, utilizando menos plástico o fabricándolos con materiales alternativos. Por ello, los expertos en envases de Greiner Packaging trabajan en su cartera de productos para mejorar la sostenibilidad introduciendo cambios o nuevas soluciones. La última novedad es el vaso IML termoformado.
En el pasado, el método de decoración de etiquetado en molde (IML) sólo se utilizaba combinándolo con la tecnología de producción de moldeo por inyección. Pero ahora, Greiner Packaging ha aprovechado su experiencia en termoformado para ofrecer vasos IML termoformados. La ventaja de esta técnica es la reducción del uso de material: se necesita menos plástico para los vasos termoformados, lo que ahorra recursos y hace que los vasos sean más ligeros. Como resultado, son responsables de menos emisiones de CO2 durante el transporte. Tanto el vaso como la etiqueta IML están fabricados en PP, por lo que se trata de una solución monomaterial muy fácil de reciclar. Siempre que es posible, Greiner Packaging también intenta utilizar material reciclado, aunque el uso de material reciclado mecánicamente para aplicaciones alimentarias sigue siendo muy limitado debido a los estrictos criterios de aprobación, y actualmente sólo el r-PET cumple los requisitos pertinentes.
Producción eficiente para un envasado sostenible
¿Pero cómo funciona exactamente el T-IML? Durante el etiquetado en molde, se inserta una etiqueta en el molde de termoformado en el que se da forma al producto, formando así una unión sólida con el producto acabado. Con este método de decoración, el moldeado y la decoración se realizan eficazmente en un solo proceso. Tras haber invertido en un molde de prueba, Greiner Packaging ya puede fabricar vasos T-IML. Los vasos están disponibles con un diámetro de 95 milímetros y una capacidad de 500 mililitros. El cambio del moldeo por inyección al termoformado reduce el peso del vaso en este formato de 15 a 11,4 gramos, lo que supone una reducción del 25%.
Propiedades de barrera para una mayor vida útil
“En Greiner Packaging, estamos comprometidos con una economía circular y queremos adoptar un enfoque amplio para conseguirlo. Nuestros nuevos vasos T-IML, que utilizan menos material y son fácilmente reciclables, encapsulan exactamente lo que esperábamos conseguir”, subraya Philipp Maurer, director de cuentas clave de Greiner Packaging. Otra de las ventajas del nuevo envase es que la lámina utilizada en el proceso de termoformado puede impregnarse de propiedades de barrera. Esto prolonga la vida útil de los alimentos envasados y, a su vez, ayuda a evitar el desperdicio de alimentos.
Aspecto de alta calidad
Además, el IML es una forma de decoración de envases de especial calidad. Se pueden aplicar efectos decorativos mates, rugosos, brillantes o de tacto suave, y el contenido impreso es de calidad fotográfica y, por tanto, visualmente excepcional. “Las soluciones de envasado IML son extremadamente eficaces para atraer la atención de los consumidores en el punto de venta. Además de sus atributos de sostenibilidad, esto es naturalmente una verdadera ventaja”, añade Maurer.
Fuente: Interempresas