Para fortalecer su línea de carnes vegetarianas en Europa, JBS, la mayor productora de carne del mundo, confirmó la compra de Vivera, compañía neerlandesa fabricante de proteínas vegetales por 341 millones de euros (unos 410 millones de dólares).
La transacción incluye tres plantas y un centro de investigación y desarrollo ubicado en los Países Bajos, según un comunicado divulgado hoy por la gigante cárnica.
Vivera es la mayor empresa independiente que produce alimentos de base vegetal para grandes minoristas en 25 países de Europa, con una presencia relevante en los mercados de Países Bajos, Reino Unido y Alemania.
“Es un paso importante hacia el fortalecimiento de nuestra plataforma global de proteínas vegetales. Vivera aporta músculo a JBS en el sector”, señaló Gilberto Tomazoni, CEO global de JBS, citado en el comunicado.
De acuerdo con la compañía, para fomentar su “espíritu emprendedor”, mantendrá a Vivera como una unidad de negocio autónoma y conservará su actual jefatura.
La multinacional brasileña entró al mercado de carnes vegetales en 2019 y en Brasil ya domina cerca del 57 por ciento del mercado de hamburguesas de base vegetal en el país.
La transacción fue aprobada por unanimidad por el Directorio de la JBS y está sujeta a la validación por parte de las autoridades antimonopolio.
La multinacional, que además de ser la mayor productora cárnica del mundo es la segunda compañía de alimentos del planeta, cuenta con unas 400 unidades de procesamiento de carne bovina, porcina, ovina y de pollo en quince países de cinco continentes, entre los que figuran Brasil, Estados Unidos, Canadá, Reino Unido, Australia y China.
Con más de 250 mil empleados, la empresa brasileña también comercializa cueros, productos de higiene y limpieza, colágeno y biodiésel.
Entre sus marcas destacan Swift, Friboi, Seara, Maturatta, Cabaña Las Lilas, Pilgrim’s Pride, Gold Kist Farms, Pierce, 1855, Moy Park y Big Frango, entre otras.
En 2017, la compañía fue objeto de la operación policial “Carne fraca” (Carne Débil), que destapó una red que falsificaba los resultados de las pruebas de calidad que se hacían a las muestras de sus productos, lo que le causó una fuerte crisis de la que comienza a recuperarse.
En 2020, JBS obtuvo un beneficio neto de 4 mil 598 millones de reales (unos 821 millones de dólares), lo que supone 24.4 por ciento menos que en 2019, aunque alcanzó una facturación récord.
Fuente: Milenio