Muchos de los alimentos comunes que llenan la despensa y la nevera hoy están siendo replicados en los laboratorios más avanzados para buscar alternativas más sostenibles, libres de crueldad animal o con una huella hídrica y de carbono mucho más reducida.
Los ejemplos de comidas impresas en 3D y obtenidas por fermentación celular son múltiples y variados: la cara y codiciada carne waygu, pescados y mariscos, queso, bacon, embutidos, chuletones e incluso café o chocolate. La leche de vaca no es menos: ya se buscan formas de cultivarla de forma sintética, sin necesidad de ganado implicado en la ecuación.
Tal y como explica un reciente artículo publicado en The Conversation, la industria láctea está cambiando con la irrupción de los primeros proyectos de leche artificial, con una composición bioquímica igual que la leche animal, pero cultivada mediante la fermentación de precisión.
Esta consiste en una técnica de biotecnología que permite la programación de microorganismos para producir moléculas orgánicas complejas como proteínas, que pueden combinarse para replicar ingredientes lácteos, según explica eDairy News. La leche artificial, con muchos escollos por delante, podría ser una alternativa justa, viable y sostenible, sin emisiones de metano ni crueldad animal.
Una reciente investigación publicada por Milena Bojovic de la Universidad Macquarie sobre las grandes tendencias del sector lácteo mundial revela que las leches de origen vegetal y, de forma potencial, las sintéticas, representan una disrupción clave en la actualidad.
En cuanto a la experiencia para el consumidor, la leche de laboratorio puede ofrecer el mismo sabor, apariencia y sensación que la leche de vaca normal, algo que todavía cuesta replicar en el caso de la carne in vitro.
Para que la leche artificial acabe en los lineales del supermercado falta capital, mejoras técnicas en tanques de fermentación y biorreactores, así como una fuerte apuesta de inversión en investigación y desarrollo.
Otros desafíos planean sobre el sector de la leche alternativa, como evitar replicar las desigualdades existentes en el sistema alimentario actual.
¿Qué startups están desarrollando leche sintética en el laboratorio?
Varias compañías lideran el desarrollo de leche sintética. En Estados Unidos, la startup californiana Perfect Day aboga por lácteos libres de explotación animal. La leche se crea a través del gen de la leche de vaca y se reproduce gracias al hongo, creando un resultado prácticamente idéntico al original, y comercializado a través de productos como queso crema o helados.
En Australia destaca la empresa emergente Eden Brew, cuya leche sintética pretende satisfacer a los consumidores cada vez más preocupados por el cambio climático y, en particular, por el aporte de metano de las vacas lecheras. También emplea fermentación de precisión para producir las mismas proteínas de los lácteos tradicionales, a las que se añaden minerales, azúcares, grasas y sabor.
Fuente: Business Insider