Científicos modificaron genéticamente algunas gallinas para que sus huevos contengan medicamentos anticancerígenos. ¿Por qué interesa producirlo a partir de alimentos?
Producir medicamentos a partir de alimentos podría ser clave en el futuro de la industria farmacéutica.
Investigadores del Instituto Roslin de la Universidad de Edimburgo han logrado usar la edición genética para que las gallinas pongan huevos que contienen medicamentos contra el cáncer.
La mayor ventaja de obtener los medicamentos mediante esta vía es un costo considerablemente menor. Cuesta entre 10 y 100 veces menos producir los medicamentos a partir de huevos que en un laboratorio farmacéutico. El mayor ahorro proviene de la infraestructura: construir y mantener un gallinero es más barato que los laboratorios.
Las gallinas viven en gallineros grandes y están bien cuidadas, probablemente mejor que un animal de granja, aseguran los investigadores. Así, la modificación no afecta a su salud, y el animal no nota diferencia alguna: come, bebe y pone huevos.
La causa de muchas enfermedades es que el cuerpo no produce suficiente cantidad de cierto químico o proteína, pudiendo tratarse suministrando medicamentos con la proteína deficiente. Producir estas drogas sintéticamente es muy caro. Así, los científicos de esta investigación también lograron recortar gastos insertando un gen humano, que normalmente produce la proteína en humanos, en la parte del ADN de la gallina encargado de producir la clara de los huevos.
Se han centrado en dos proteínas esenciales para el sistema inmune: IFNalpha2a, con efectos anticancerígenos y antivíricas, e IFNalpha2a, para la reparación de tejidos dañados.
¿Qué podemos esperar de la edición genética en 2019?
Una dosis del medicamento puede obtenerse a partir de 3 huevos, y una gallina puede poner hasta 300 al año. Con suficientes animales el equipo científico confía en poder producir medicamentos para uso comercial, informan desde la BBC.
Eso sí, desarrollar medicamentos para humanos a partir de huevos de gallina es un proceso que requeriría entre 10 y 20 años, teniendo en cuenta no sólo la investigación científica sino también los retos regulatorios. Mientras tanto, los investigadores se centrarán en usar las gallinas para producir medicamentos para animales.
Fuente: TIC beat