Un proyecto interdisciplinario de la UNC determinó que los aceites esenciales del orégano, romero y de plantas serranas pueden conservar granos, chacinados, carnes y otros productos. Ahora quieren producir nanocápsulas para que estos aditivos naturales no impacten en las características sensoriales de los alimentos.
Investigadores de la Universidad Nacional de Córdoba (UNC) están probando plantas aromáticas como conservantes de granos, carnes, quesos y leche de soya. El producto final será una harina de nanocápsulas que funcione como un aditivo natural.
Según indica el portal UNCiencia, el objetivo es reemplazar los productos químicos que se utilizan en la industria para prolongar la vida útil de estos alimentos. Ya que muchas veces esos aditivos pueden resultar perjudiciales para salud.
El grupo está integrado por 40 especialistas de agronomía, medicina, ingeniería y química y recibe el financiamiento del Programa Institucional y Multidisciplinar (Primar) de la Secretaría de Ciencia y Tecnología de esta casa de estudios.
Utilizan especies aromáticas de las sierras cordobesas o cultivadas en la provincia, como orégano, romero, laurel y menta, extraen aceites esenciales y evalúan sus propiedades como antioxidantes y antimicrobianos.
“Buscamos mejorar la conservación de alimentos a través de la aplicación de aditivos naturales que actúan como conservantes, apuntando a sustituir o disminuir el uso de los sintéticos”, comenta Rubén Grosso, coordinador del proyecto.
Hasta ahora, se realizaron pruebas en granos de oleaginosa (maní, girasol, almendras y otros), bifes de chorizo y leche de soya.
Los ensayos en laboratorio e in vitro muestran que el uso de estos compuestos naturales prolonga la vida útil de los alimentos un 30 por ciento más que los conservantes artificiales y, en algunos casos, la duplica. También hallaron resultados similares sobre su capacidad antimicrobiana.
“En chorizos y salamis, muchas veces se colocan compuestos sintéticos, como nitritos, sulfitos y otros conservantes, que no son buenos para la salud. Con este proyecto buscamos reemplazar un producto químico sintético por otro natural, que además resulta beneficioso para nuestro organismo”, cierra.
Fuente: La Voz