El pasado 26 de octubre tuvo lugar en Monells (Girona, España) una jornada de cierre y de difusión de los resultados del proyecto europeo ENTHALPY, sobre tecnologías que mejoran la sostenibilidad del procesado de la leche. El IRTA es el primer centro de investigación del mundo que dispone de estas tecnologías de tratamiento.
Fue una jornada abierta a los socios del proyecto, a otros científicos (especialmente relacionados con la industria láctea), y a empresas de toda Europa. Por la mañana se realizaron presentaciones en el auditorio y por la tarde se visitaron las nuevas infraestructuras científicas que el proyecto ha financiado.
Las dos instalaciones parte del proyecto europeo ENTHALPY son únicas en el mundo y contienen sistemas que permiten esterilizar la leche con energía solar térmica y radiofrecuencias.
Por un lado, está el sistema de captación de la energía solar térmica, en temperaturas superiores a 100 °C (sistema de media temperatura), que permite calentar agua hasta a 160 °C y llevar el calor hasta un equipo UHT (donde se permitirá esterilizar la leche utilizando sólo energía renovable), o bien hasta el atomizador de leche en polvo (para el secado de la leche). Se trata de una infraestructura única en el mundo y se ha trabajado conjuntamente con el IREC (Institut de Recerca i Energia de Catalunya). El sistema está diseñado para poder trabajar en condiciones climáticas variadas de sol (poco o mucho) y está completamente monitorizado, lo que permitirá hacer estudios científicos de aplicación de esta fuente de energía renovable.
Y por otro lado, está el sistema de esterilización UHT por radiofrecuencia. Estas ondas electromagnéticas permiten un calentamiento rápido de líquidos alimentarios complejos (de alta viscosidad o con partículas), utilizando energía eléctrica, una fuente más sostenible que el gas natural de las calderas de vapor. En este caso, y junto con la empresa Inoxpa, se ha diseñado un equipo que puede trabajar con calentamiento indirecto (vapor de caldera o agua sobrecalentada solar), con calentamiento directo (inyección de valor alimentario) o por radiofrecuencia. También se puede envasar el alimento tratado asépticamente.
Fuente: Interempresas