Recientemente se ha aprobado la nueva Ley de residuos y suelos contaminados para una economía circular. Esta Ley presenta importantes implicaciones sobre los residuos de envase, promoviendo estrategias de ecodiseño en envases como la reutilización y reciclabilidad, entre otros aspectos. Te contamos algunas de ellas.
La nueva Ley de residuos y suelos contaminados para una economía circular
El pasado 31 de marzo se aprobó la nueva Ley de residuos y suelos contaminados para una economía circular. La Ley tiene por objeto sentar los principios de la economía circular a través de la legislación básica en materia de residuos, así como contribuir a la lucha contra el cambio climático y proteger el medio marino. Se contribuye así al cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible, incluidos en la Agenda 2030 y en particular a los objetivos 12 –producción y consumo sostenibles–, 13 –acción por el clima- y 14 –vida submarina–. Asimismo, en el ámbito de su contribución a la lucha contra el cambio climático, esta ley es coherente con la planificación en materia de energía y clima.
Como podemos observar, la nueva legislación, que ha alcanzado gran relevancia antes de que comenzase a ser aplicada, debido al gran impacto en lo relativo a los productos de plástico de un solo uso y otras medidas de índole fiscal, quiere dar un vuelco a la situación sobre los residuos y de ese modo lanzar las políticas sobre Economía Circular.
Estamos ante una legislación muy ambiciosa, tanto por los objetivos propuestos, como por las distintas líneas de actuación que plantea residuos, economía circular, suelos contaminados, medidas fiscales, etc. El planteamiento de una regulación tan variada hace necesario un adecuado desarrollo reglamentario para facilitar su aplicación y no solo eso, también es muy conveniente que por parte de todos los agentes implicados se trabaje en el diseño y desarrollo de herramientas para asegurar un elevado nivel de compresión y aplicación, debemos contar con guías de apoyo.
Por último, pero no menos importante, teniendo en cuenta el gran impacto que va a tener para el sector agroalimentario, se plantean dudas sobre si los operadores podrán disponer de las materias primas necesarias para cumplir con las exigencias en cuanto a empleo de productos reciclados y todas las medidas para reducir la presencia de los productos de plástico de un solo uso. Los operadores deberán trabajar desde el punto de vista técnico para poder cumplir con las obligaciones legislativas.
Estrategias de ecodiseño como herramienta para reducir el impacto medioambiental de los residuos de envases
Esta Ley, como bien indica su título, está enfocada a residuos, sin especificar el tipo (alimentación, construcción, textil…), aunque los residuos de envase presentan algunas menciones especiales que a continuación describimos.
• Se regulan específicamente los envases de plástico de un solo uso: Concretamente, en el Título V de esta Ley, y que corresponde con la transposición de la denominada ‘Directiva SUP’, dentro de los productos de plástico de un solo uso, se regulan específicamente los envases de plástico de un solo uso.
• Impuesto especial sobre los envases de plástico no reutilizables (enero de 2023): Y, por otro lado, en el Título VII se describe el nuevo impuesto especial sobre los envases de plástico no reutilizables, que entrará en vigor el 1 de enero de 2023. Estas regulaciones se pueden relacionar, a su vez, con diferentes estrategias de ecodiseño de envases, entre las que destacan la reutilización y el reciclaje de envases.
Nuevo Real Decreto de Envases y Residuos de Envases (en fase de tramitación)
Por otro lado, tampoco hay que olvidar que, al mismo tiempo, se encuentra en fase de tramitación el nuevo Real Decreto de Envases y Residuos de Envases, que se espera que apruebe este año, y que terminará de describir los objetivos con relación a los envases y sus residuos.
Estos aspectos se tratarán en la próxima Jornada Técnica, que tendrá lugar el 14 de junio, en el marco de la plataforma Prospectiva de Envases y Economía Circular.
Envases reutilizables: cada vez más opciones disponibles
1.Prevención: Tal y como se menciona en la Ley, dentro del principio de jerarquía de residuos, en primer lugar, y por orden de importancia, se encuentra la prevención de residuos, y en segundo lugar se encuentra el concepto de “preparación para la reutilización”.
2. Preparación para la reutilización: En la Ley se define este concepto, sin embargo, no se define el concepto de “envase reutilizable”. Por lo que esta definición hay que buscarla en el Proyecto de Real Decreto de Envases y Residuos de Envases, donde se especifica como: “Todo envase que ha sido concebido, diseñado y comercializado para realizar múltiples circuitos o rotaciones a lo largo de su ciclo de vida, siendo rellenado o reutilizado con el mismo fin para el que fue concebido“.
De manera que sólo en el caso de que el envase se vuelva a utilizar para el mismo fin, se considerará reutilizable. En esta definición queda patente el concepto de la “circularidad” que se busca. En el ámbito de los envases, la reutilización parece una opción factible en el caso de los envases que no destinados a uso alimentario o se trate de envase secundario.
El mayor reto se encuentra en los envases alimentarios domésticos, es decir, los envases que están en contacto directo con el alimento y van destinados al consumidor final. En este caso se hace especialmente crítico los aspectos de seguridad que se deben garantizar.
A pesar de esta dificultad, ya existen en el mercado productos comerciales, como es el caso de ALPLA, que recientemente ha lanzado una botella de PET reutilizable para uso alimentario doméstico.
Envases reciclables: el reciclaje químico cobra interés
1. Reciclado: Siguiendo con la jerarquía de residuos anteriormente mencionada, por debajo de la reutilización se encuentra el reciclado. Reciclar, tal y como se define en la Ley “consiste en toda operación de valorización mediante la cual los materiales de residuos son transformados de nuevo en productos, materiales o sustancias, tanto si es con la finalidad original como con cualquier otra finalidad. Incluye la transformación del material orgánico, pero no la valorización energética ni la transformación en materiales que se vayan a usar como combustibles o para operaciones de relleno”.
En el caso de los envases, existen 3 tipologías de reciclaje: mecánico, químico y orgánico. El proceso más desarrollado y común es el reciclaje mecánico. Sin embargo, el reciclaje químico, cada vez va cobrando más interés y puede suponer una alternativa al reciclaje mecánico para alguna tipología de envases difícilmente reciclables con las tecnologías convencionales. Cabe destacar, que, en la propia Ley de Residuos, en su versión definitiva se ha incluido la opción del plástico reciclado procedente de reciclaje químico como posibilidad para evitar el impuesto especial para los envases de plástico de un solo uso.
En cualquier caso, la tecnología de reciclaje mecánico sigue actualizando sus capacidades, especialmente en lo relativo a la detección de las diferentes tipologías de materiales.
Aunque hay que recordar que el reciclaje mecánico sólo es posible a partir de una buena segregación de los residuos, algo que implica no sólo a las empresas gestoras de residuos, sino también a toda la sociedad.
Fuente: Interempresas