La abadía de Grimbergen combinará las tradiciones de elaboración de los libros antiguos de su biblioteca con técnicas modernas.
¿Te imaginas probar la misma cerveza que disfrutaban quienes vivían hace 220 años? A partir del verano de 2020 será posible gracias a los monjes de la abadía de Grimbergen, situada en la provincia del Brabante flamenco (al norte de Bruselas), quienes ‘rescataron’ una antigua receta de su comunidad para producir un nuevo modelo de cerveza. Los religiosos se inspiraron en los libros antiguos que hay en su biblioteca y los combinarán con las técnicas más innovadoras de la actualidad para fabricar lotes de edición limitada de cervezas premium.
Los monjes de Grimbergen ya obtuvieron los permisos para construir una nueva microcervecería dentro de las murallas de su abadía. De esta manera, quieren traer la elaboración de cerveza al lugar donde comenzó y, haciendo honor a su lema, Ardet nec consumitur (‘Quemado pero no destruido’), van a rehabilitar una fábrica que fue arrasada por las tropas francesas de Napoleón en 1798. La nueva instalación será ubicada en el mismo lugar donde la cerveza se preparaba en el siglo XVIII. Los religiosos están renovando una sala de la abadía para convertirla en una nueva planta de cerveza en la que trabajarán entre cinco y diez personas.
La sala permitirá una pequeña producción de 10 000 hectolitros por año de la cerveza, que ahora está comercializada por Carlsberg y Alken Maes, que se asociaron a la iniciativa. En concreto, tienen previsto elaborar la cerveza rubia “triple”, que madurará su sabor durante cinco meses en barriles de whisky, como se hacía en el siglo XVI, y una parte de la producción se exportará a Francia.
Uno de los protagonistas de este proyecto es el padre Karel, subprior de la Abadía y quien se convertirá en el primer padre en combinar la preparación formal de cerveza con generaciones de conocimientos de fabricación de cerveza de Abbey. “La cerveza siempre ha sido parte de la vida en la abadía y estamos orgullosos de las cervezas que tenemos hoy. Realmente hemos disfrutado leyendo más sobre las tradiciones de elaboración del pasado”, dijo durante la presentación del nuevo proyecto.
Libros del siglo XII
La biblioteca de la abadía está completa de multitud de libros medievales en los que los abades han profundizado en los últimos años para descubrir técnicas de elaboración que “hasta ahora se han perdido a la historia”. De ellos han sacado ingredientes de cervezas elaboradas en siglos anteriores, los lúpulos utilizados, los tipos de barriles y botellas, e incluso una lista de las cervezas reales.
Los libros de la Abadía que han servido de inspiración datan del siglo XII y su valor es aún mayor porque fueron de las pocas cosas que lograron sobrevivir a los tres incendios que destruyeron la Abadía. De hecho, en el último ocurrido en 1978, los religiosos tuvieron que realizar un agujero en la pared para sacar en secreto 300 libros.
La Abadía de Grimbergen tiene un largo recorrido en la industria cervecera y ha sido premiada por sus famosas cervezas belgas. Ahora, con la nueva edición pretenden potenciar aún más su marca y, junto a la microcervecería, incluirán un tour turístico que permitirá sumergirse en el patrimonio de Grimbergen, además de un bar y un restaurante.
Fuente: La Información
