La carambola es una fruta exótica, poco conocida como materia prima y que exhibe condiciones idóneas. Presenta propiedades que contribuyen al tratamiento de diversas enfermedades. Dentro de las opciones de consumo agrega nuevos aromas y proporciona una opción novedosa al tradicional vino de uvas.
Es dulce, muy baja en calorías, su consumo alivia problemas de colesterol, riñón, intestinales y gástricos. Por estos atributos únicos de la carambola, la investigadora misionera Nicole Freiberger (24) estudia la aplicación biotecnológica de las levaduras que se pueden extraer de su fruto para la producción artesanal de vino misionero.
Con respaldo científico, dentro de las opciones que se investigan para el consumo, la carambola agrega, en ese sentido, nuevos aromas y proporciona una opción novedosa a la tradicional bebida alcohólica producida con zumo de uvas.
“Arrancamos la investigación con la idea de buscar frutas que se cultiven en la región, que contengan levaduras que puedan ser utilizadas en la elaboración de bebidas alcohólicas y para otras actividades biotecnológicas”, contó a PRIMERA EDICIÓN Freiberger , licenciada en genética, consultada acerca de sus estudios.
“La especificación del trabajo era aprovechar la biodiversidad de la provincia, donde existe el cultivo de distintas variedades de frutas, buscar alguna que no sea muy conocida y aplicarla en la elaboración de bebidas”, explicó.
“Luego de someter a una amplia variedad de frutas a criterios de evaluación, elegimos la carambola porque se trata de una planta muy productiva a lo largo de varios meses al año (de enero a marzo y de agosto a noviembre). Con la carambola no había esa limitante de esperar sólo una vez año. Además de aislar las levaduras de la fruta, también elaborábamos el jugo para hacer el vino”, especificó Freiberger.
“A la hora de buscar las frutas, una vez que estuvieron seleccionadas las posibles candidatas, vimos que la carambola tenía muchos beneficios para la salud”, agregó.
“En general, de por sí se sabe que tienen características beneficiosas, la consumen las personas con problemas de colesterol, de riñón, intestinales y gástricos. También lo hacen quienes quieren adelgazar”.
Trabajo de campo y resultados
Nacida en Puerto Rico, Nicole Freiberger realizó un trabajo de campo que le demandó casi dos años y la experiencia a pequeña escala comenzó por la selección de un grupo de frutas exóticas, todas introducidas a la provincia pero que lograron adaptarse y desarrollarse.
“Cultivamos gracias al apoyo de algunas familias productoras de carambolas en la localidad de Garuhapé, llevábamos todo al laboratorio central de la facultad en Posadas y ahí seguíamos con la tarea de aislar la levadura y preparar el mosto”, comentó la joven profesional.
“Actualmente existen intentos aislados de introducir bebidas de producción artesanal dentro del mercado local y regional, pero las mismas no cuentan con respaldo científico certero, lo que dificulta su estandarización y también la difusión del producto final. Por eso entendemos que estas investigaciones serán un gran aporte para el mercado”, subrayó.
Finalizado el proceso también hubo una etapa de prueba y su resultado cayó muy bien entre los eventuales consumidores, quienes aseguraron que “lo comprarían de encontrarlo en los mercados”.
Contribuir a la diversificación
Rosa Nicole Freiberger se encuentra realizando un doctorado en Ciencias Biológicas en el CONICET y recientemente defendió su tesis de la Licenciatura en Genética. Lo hizo mediante el sistema de examen a distancia, en el marco de las medidas de protección ante la propagación del COVID-19.
El proyecto de tesis “Caracterización de levaduras nativas para la producción de bebidas fermentadas con denominación de origen”, con beca otorgada por el Consejo Interuniversitario Nacional de Estímulo a las vocaciones científicas EVC-CIN, obtuvo altas calificaciones y abrió una nueva mirada a las opciones de diversificación productiva de la provincia.
De hecho, su investigación se realizó teniendo en cuenta las problemáticas de las frutas factibles de ser utilizadas, para así contribuir a la diversificación de productos regionales e identificación de nuevas cepas de levadura.
“Existen numerosos factores que influyen en la calidad final del vino, por lo cual los detalles deben ser pulidos. Dar respaldo científico a estas iniciativas va a ser beneficioso para Misiones”, aseguró.
Fuente: Primera Edición (Argentina)