Debido a su alto contenido de nutrientes esenciales como vitamina A y del grupo B, potasio o fósforo, aparte de proteínas completas que brindan los aminoácidos necesarios para el crecimiento y la reparación de tejidos, la leche es un alimento básico en muchas culturas. Su consumo es imprescindible sobre todo para los niños, ya que al ser una fuente de calcio contribuye al desarrollo y fortalecimiento de huesos y dientes hasta alcanzar la densidad ósea óptima.
La historia de un alimento tan relevante que ha acompañado la nutrición de la humanidad por siglos, merece ser documentada para entender su evolución e incluso imaginar su futuro; especialmente en un país como México, donde esta actividad representa el 17% del valor de la producción pecuaria, siendo la tercera más importante después de la carne bovina y de ave, de acuerdo con la la Cámara Nacional de Industriales de la Leche (CANILEC).
Bajo esa perspectiva, la CANILEC acaba de lanzar el libro “Historia de la Leche y sus Derivados en México”, una obra sin precedentes que aborda desde los orígenes de este alimento hasta los avances tecnológicos o retos a los que se ha enfrentado la industria, compuesta no sólo por fabricantes de derivados lácteos sino también por empresas de envasado, cuyo papel para hacer que la leche llegue en óptimas condiciones a los lugares más recónditos del territorio nacional ha sido crucial y no siempre es visible para la mayoría de la población.
Durante la presentación de este material que incluye relatos y testimonios de 43 empresas del sector lácteo, Alfa Editores Técnicos entrevistó a Marcela Mendoza, directora de Marketing para Tetra Pak México, quien reflexionó sobre cómo han cambiado a lo largo de los años los envases para leche y el fuerte paradigma que significó la tecnología aséptica del tratamiento a altas temperaturas (UHT, por sus siglas en inglés), mediante el cual se maximiza la destrucción de microorganismoshaciendo que el producto final sea apto para la distribución a temperatura ambiente.
La revolución detrás del envase
“Tetra Pak vino a evolucionar y a provocar todo un cambio en la industria alimenticia, principalmente la lechera, al implementar la tecnología aséptica en México en 1962. Con ello, la leche ya no necesita refrigerarse antes de abrirse, lo cual permite que llegue a comunidades rurales y sea accesible para distintas personas de diferentes niveles socioeconómicos, incluyendo las que habitan en comunidades de difícil acceso, más allá de lograr un crecimiento importante para la categoría”; explica Marcela Mendoza.
Con la llegada a México de la empresa en 1962, un año después de haberse creado la Canilec y de que se comenzó a producir leche UHT de manera comercial en Suecia, nación donde el Dr. Ruben Rausing y el Ing. Erik Wallenberg fundaron Tetra Pak en 1951, se dió un paso importante en materia de políticas públicas para beneficio de la sociedad con el programa de desayunos escolares, actualmente implementado por el Sistema Nacional para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF), llamado Instituto Mexicano para la Infancia y la Familia (IMPI) en aquella época. Esto, en un contexto donde el 12.4% de los menores de edad padecen desnutrición en nuestro país, de acuerdo con la Cámara de Diputados.
“La empresa participa de manera importante en la nutrición diaria de millones de niños en México, y continuar apoyando ese programa tan relevante es parte fundamental de nuestras estrategias. Gracias a la tecnología aséptica, que no necesita conservadores, hacemos posible que la leche llegue a comunidades rurales y permita la nutrición de los menores; logrando que tengan cerca según sus posibilidades este importante producto para estar mejor alimentados”.
Dicho avance marcó un antes y un después en la dieta de los mexicanos; sin embargo, al inicio no fue fácil que la gente comprara alimentos envasados con tecnología aséptica. La directora de Marketing en Tetra Pak explica que el principal reto fue que el consumidor se acostumbrara a adquirir y consumir leche fuera del refrigerador; pero como sucede generalmente con los hábitos, más pronto que tarde las personas fueron encontrando las ventajas y entendiendo los beneficios de tener a la mano este tipo de productos.
Comenta que hoy en día la leche UHT o ultrapasteurizada representa el 60% del mercado nacional, compitiendo con la versión fresca o solamente pasteurizada. Independientemente de las ventajas desde el punto de vista de la conveniencia o refrigeración, la tecnología aséptica de los envases de Tetra Pak significó un hito para la seguridad alimentaria ya que evita la aparición de bacterias.
Este paso en la esterilización de alimentos también fue aprovechado por fabricantes o procesadores de otros tipos de productos, como jugos, sopas, salsas, postres, preparaciones a base de tomate, frutas, comidas para bebés, cremas y leches saborizadas UHT o alternativas lácteas como las bebidas de soya y de otras fuentes plant-based; cuyo consumo ha experimentado un crecimiento constante en América Latina, con Brasil como el país líder en la región seguido por México, aunque se espera que para el año 2026 se inviertan las posiciones según análisis de Statista.
Escuchando al consumidor: tecnología y momentos de consumo
En lo que respecta a tamaños y formas de envasado, Marcela Mendoza destaca que la evolución del famoso tetraedro o “triángulo”, con el que la compañía acompañó la alimentación de varias generaciones de familias mexicanas, ahora ha escalado a una amplia variedad de formatos con distintos tipos de apertura; adaptándose a las necesidades del consumidor, los grupos de edad y los requerimientos de las marcas.
“Hoy contamos con un portafolio muy versátil, el más grande de la industria, y todas las personas pueden encontrar el envase que les guste y se acomode a su vida diaria. Tenemos un departamento de investigación y desarrollo en Suecia, donde está la matriz de la empresa, y ahí lo que se busca es tomar en cuenta todas las necesidades de cada mercado, pues estamos presentes en más de 160 países”; señala.
La firma líder en su segmento procura estar muy cerca de los clientes de la industria y del consumidor final, para saber qué es lo que requieren, e integra esas necesidades a las innovaciones que propone. “Esto se traduce en que todas las alacenas de México guarden seguramente productos con al menos un envase de Tetra Pak. Tenemos más formatos y nuevos sistemas de apertura, siempre pensando en las necesidades del consumidor pero también en los objetivos de negocio de los clientes en cada sector”.
Cuidando al planeta desde los envases
Para Tetra Pak, el aspecto sostenible o medioambiental de los envases que produce es muy importante, afirma la vocera. En consecuencia, muchos de sus avances en innovación están encaminados a tener soluciones todavía más sustentables en el año 2030; partiendo de que actualmente el 75% de los envases que fabrican están hechos de cartón, priorizando el uso de materiales provenientes de fuentes renovables.
“Trabajamos bajo el concepto de economía circular y toda la composición de nuestros envases se recicla. Por ejemplo, parte del papel se va a la industria sanitaria para convertirse en toallas para las manos, servilletas o papel de baño. Mientras que el polialuminio, que es una mezcla de polietileno y aluminio, se usa para hacer techos o pupitres para escuelas, pisos, coladeras y hasta las bases donde se fijan las bicicletas del sistema de transporte público Ecobici en la Ciudad de México”; detalla.
Paralelamente, la empresa de origen sueco fomenta la recolección de sus envases a través de campañas y comunica a los consumidores cómo deben separar los residuos de manera correcta, para que el dar una nueva vida a los envases sea cada vez más sencillo. Se trata de que las personas sepan que con cada envase consumido de Tetra Pak están ayudando al planeta.
“Tenemos una frase que dice ‘el reciclaje no es nuestro negocio, nuestro negocio es hacer que el reciclaje funcione’. A partir de esta premisa acompañamos hasta el final a nuestros clientes y a los propios recicladores, teniendo con ellos una participación muy activa para generar progresivamente una recolección que nos permita transformar el envase en diferentes productos. Independientemente de que buscamos que los nuevos formatos de envases por lanzar sean cada vez más sostenibles. Todo el plan de innovación de Tetra Pak considera siempre la parte medioambiental”.
Al ser la sostenibilidad un punto estratégico para la compañía, sumado a la relevancia que ha tenido internacionalmente para la seguridad e inocuidad de lo que millones de personas ingieren diariamente, un lema complementario de Tetra Pak es “proteger los alimentos, a las personas y a nuestro planeta”. Considerando las problemáticas medioambientales del siglo XXI, es digno de reconocer que los envases producidos por la compañía con presencia global sean reciclables, y que detrás de ellos exista un esquema sostenible tan amplio como relevante.
Tecnología UHT, un regalo de Tetra Pak para el mundo
Por último, vale la pena ampliar un poco más sobre el cómo la tecnología UHT (Ultra High Temperature) para el procesamiento de leche revolucionó la industria láctea, al ofrecer una forma de conservar este alimento por períodos prolongados sin necesidad de refrigeración, manteniendo al mismo tiempo la calidad nutricional y la seguridad para el consumidor.
Si bien el concepto de pasteurización se debe a Louis Pasteur en el siglo XIX, resumido en procesar alimentos mediante calor para destruir microorganismos patógenos y prolongar la vida útil, la tecnología UHT que hoy se usa para envasar leche es una evolución de dicha técnica, diseñada para extender la conservación aún más y surgida como una respuesta a la necesidad de la industria por ofrecer productos más duraderos y fáciles de transportar.
En el caso específico de la leche, la tecnología UHT consiste en calentarla a temperaturas entre 135 y 150 °C durante 2 a 5 segundos, para luego enfriarla rápidamente y con ello eliminar casi todos los microorganismos o esporas sin comprometer significativamente los nutrientes. Aunque se empezó a producir leche UHT de manera comercial en 1961, no fue sino hasta la década de los 70 cuando se expandió rápidamente a nivel mundial, debido a su conveniencia y eficiencia.
Anteriormente, la leche únicamente pasteurizada requería refrigeración constante y tenía una vida útil de pocos días. Pero con la irrupción de la tecnología UHT es posible almacenarla durante meses a temperatura ambiente, lo que facilita su distribución en lugares remotos y su inclusión en planes alimentarios dentro de zonas con infraestructura limitada, como es el caso de muchos municipios en México. En este sentido, se trata de una innovación técnica con espíritu social.
Entre los impactos en la nutrición de la leche UHT, destaca el hecho de que el calcio, las proteínas y la mayoría de las vitaminas (como la B2) permanecen estables. Y aunque en el proceso se pierde una pequeña cantidad de vitaminas sensibles al calor, como la vitamina C y algunos compuestos de vitamina B como la B1 o tiamina, dicha pérdida resulta insignificante si se toma en cuenta que este lácteo no es una fuente principal de tales vitaminas.
Por otro lado, la leche UHT es prácticamente estéril, lo que reduce el riesgo de enfermedades transmitidas por alimentos. Algo especialmente importante en áreas donde la refrigeración o la calidad del agua son problemáticas. Y al ser estable a temperatura ambiente, la leche UHT vino a reducir significativamente el desperdicio en la cadena de suministro y en los hogares por igual.
Mientras que desde la mirada industrial y de negocios, la tecnología UHT permitió la creación de nuevos productos lácteos como bebidas saborizadas, cremas o versiones fortificadas con vitaminas y minerales.
Para Marcela Mendoza, directora de Marketing para Tetra Pak México, el mayor valor social de la leche UHT es permitir que las poblaciones en regiones rurales o con infraestructura limitada tuvieran acceso a una fuente segura de proteínas y calcio. Por esa razón es ampliamente utilizada en programas de ayuda humanitaria o en situaciones de emergencia, donde la refrigeración no es posible. En términos de seguridad, accesibilidad y conveniencia Tetra Pak ha transformado la manera en que las personas consumen y acceden a un alimento tan esencial como la leche.
