Barras de chocolate, harina y antojitos serán utilizados para camuflar el sabor de insectos como grillos y larvas en Portugal.
Este país está buscando que los consumidores acepten los insectos como fuente de proteína, y que tengan un primer acercamiento con la ayudar del chocolate y la harina.
El consumo de insectos para humanos ya fue aprobado, e insectos como larvas, grillos, escarabajos y langostas serán mezclados con barras de chocolate y harinas de sabores para el proceso de adaptación.
Insectos en harina y chocolate, la nueva proteína en Portugal
Estos animales estarán en venta en los supermercados a partir de este verano. Se pretende que los países europeos acepten su consumo como la proteína y el alimento del futuro.
Menos gasto de agua y menos gases de efecto invernadero son los beneficios que se están difundiendo, así como el aprovechamiento de vegetales, restos de cereales y levadora de cerveza en las fábricas.
Insectos contra cambio climático y desperdicio de alimentos
Las siete especies con las que se abrirá el mercado son posibles de producir en Portugal, y las dos más comunes con la larva de la harina y el grillo doméstico.
El nuevo negocio en el país se enfrenta al reto de “derribar los prejuicios” hasta que los insectos saborizados sean comunes. Grillos con sabor a queso o a jamón pueden ser “las nuevas papas fritas” que se coman con una cerveza, según Guilhem Pereira, responsable de la empresa de producción de insectos Portugal Bugs.
Fuente: Razón