Notialfa

Crean envases comestibles para alimentos

Degustar un alimento y comerse hasta el envase ya es posible. También ha llegado la hora de recubrir las fresas y los champiñones con productos naturales que alargan su vida útil al retrasar su maduración e igualmente son comestibles. El instituto tecnológico valenciano Ainia ha creado a partir de residuos agroalimentarios envases comestibles que «ofrecen una solución innovadora para la sostenibilidad». Estos envases, además de ser biodegradables, «pueden consumirse junto con el alimento, eliminando completamente los residuos».

El proyecto PrevencPack, impulsado en Valencia con el respaldo de la Generalitat y financiado por la Unión Europea, ha desarrollado envases comestibles termosellables que son aplicables en el envasado de alimentos de baja humedad. Su producción a partir de subproductos agroindustriales «supone una utilización eficiente de recursos renovables, contribuyendo a la economía circular y a la reducción de residuos plásticos».

Ainia recalca en este sentido que «reducir el impacto ambiental de los envases convencionales y minimizar el desperdicio alimentario es uno de los desafíos actuales de la industria alimentaria».

Para abordar esta problemática, el proyecto PrevencPack, desarrollado por el instituto tecnológico en colaboración con varias empresas, se ha centrado en el desarrollo de tres soluciones innovadoras: los envases y recubrimientos comestibles para alimentos y los recubrimientos para envases de cartón.

Fuentes de Ainia detallan que «los recubrimientos comestibles son capas finas de materiales naturales que, aplicadas sobre alimentos, pueden prolongar la vida útil de las frutas y hortalizas para mantener su calidad durante más tiempo». En este proyecto se ha trabajado aplicando biopolímeros naturales en fresas, porque presentan mayor sensibilidad a ataques fúngicos y en champiñones, por sus problemas de oxidaciones o pérdidas de humedad.

La aplicación de biopolímeros naturales ha conseguido retrasar la maduración, reducir la tasa de respiración y minimizar la pérdida de peso en estas frutas y hortalizas.

Mientras, los envases de cartón, especialmente aquellos utilizados para frutas y hortalizas, requieren protección adicional contra la humedad. En el marco del proyecto PrevencPack también se han desarrollado recubrimientos para este tipo de envases, basados en alginatos aplicados sobre sustratos celulósicos, que mejoran la barrera contra el vapor de agua hasta en un 35%, lo que preserva la integridad del envase y la frescura del contenido.

Fuente: ABC (España)

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *