La pasión británica por el sushi está cerca de experimentar una transformación. El Reino Unido ha aceptado a BlueNalu (empresa considerada “líder mundial” en mariscos cultivados a partir de células) en su sandbox regulatorio de alimentos novedosos. Esta inclusión no autoriza aún la venta comercial, pero permite que la firma trabaje junto a los reguladores nacionales para avanzar hacia una posible aprobación futura de su producto estrella: el toro de atún cultivado en laboratorio.
Qué es el sandbox y por qué es clave
El sandbox regulatorio de la Agencia de Normas Alimentarias del Reino Unido (FSA, por sus siglas en inglés) funciona como un laboratorio compartido entre innovadores y autoridades. Allí, las empresas trabajan junto a los organismos públicos para explorar los complejos procesos de autorización de alimentos nuevos, garantizando los máximos estándares de seguridad y transparencia.
Así, en la carrera hacia el futuro de la alimentación, BlueNalu se convirtió en la primera compañía estadounidense —y la única especializada en mariscos cultivados— admitida dentro de este selecto programa británico.
Atún cultivado en laboratorio: tecnología, sabor y sostenibilidad
La estrella de dicho avance es el toro (corte especial de la ventresca, con infiltraciones de grasa muy uniforme) de atún rojo: la sección más apreciada en su tipo, por la textura mantecosa y sabor intenso. Hasta ahora, tal delicatessen dependía exclusivamente de la pesca de atunes silvestres, con los desafíos ambientales y de sostenibilidad que ello implica.
El proceso comienza con la obtención de células reales de atún rojo, que se cultivan en biorreactores bajo condiciones controladas; alimentadas con una mezcla de proteínas, vitaminas y minerales que replican su entorno natural. Con el tiempo, las células crecen, se reproducen y forman el tejido muscular comestible que reproduce las características sensoriales del toro original.
Beneficios que convencen a consumidores y chefs
El atún cultivado en laboratorio no sólo ayuda a conservar los ecosistemas marinos, al reducir la necesidad de pesca; sino que también ofrece otras ventajas clave: está libre de parásitos, pesticidas, microplásticos, mercurio y antibióticos. Además, mantiene un alto contenido de omega-3, nutriente esencial muy valorado por los consumidores.
Su aceptación entre el público ha sido notable. En una encuesta realizada en 2024, donde participaron 2,000 consumidores frecuentes de sushi en el Reino Unido, el 92% expresó interés en probar el toro cultivado. Además, el 73% indicó que visitaría restaurantes que lo ofrecieran, y el 74% aseguró estar dispuesto a pagar igual o más que por el atún rojo convencional.
Dicha recepción refleja no sólo una curiosidad gastronómica, sino un reconocimiento a los beneficios sanitarios, medioambientales y culinarios de la innovación. En este sentido, la aceptación en el sandbox regulatorio impulsó a BlueNalu y Nomad Foods (el mayor productor de alimentos congelados de Europa) a ampliar su colaboración estratégica, iniciada en 2021.
Ambas compañías están desarrollando estrategias de entrada al mercado británico, con foco inicial en restaurantes premium y lanzamientos limitados, en caso de que se obtenga una futura autorización comercial.
Mientras los reguladores avanzan y las alianzas comerciales se fortalecen, una cosa queda clara: el Reino Unido no sólo tiene hambre de sushi, sino también de innovación. Y el toro de atún cultivado promete ser mucho más que una curiosidad tecnológica: podría ser el primer bocado de un futuro donde la sostenibilidad y la excelencia gastronómica compartan la mesa.
Fuente: BioEconomía.info (con edición de Alfa Editores)