Los lácteos aportan uno de los elementos más disfrutables en la ingesta diaria; son esenciales en distintas recetas que elaboramos a diario, y de la cultura gastronómica de muchos estilos de cocina tanto en México, como en otras partes del mundo.
El consumo de lácteos forma parte de los alimentos indicados dentro del plan de alimentación “enfoques alimenticios para detener la hipertensión”, así como los planes de alimentación centrados en la salud cardiaca de la Asociación Estadounidense del Corazón y de la Federación internacional de Diabetes.
Por estas razones, te recomendamos 3 motivos para incluir lácteos en tu vida cotidiana:
Un aliado de tus músculos
Una de los aliados para tu rutina del gimnasio es sin duda un lácteo. Esta comprobado que su consumo tras la actividad física ayuda a promover la reparación y recuperación del tejido muscular. Frente a ejercicios de resistencia regulares, sin duda un buen vaso de leche, un pedazo de queso o un yogurt, sentara el desarrollo ce masa muscular.
El origen lo es todo
En la actualidad, hay muchos lácteos modificados desde su base, que los transforma en un derivado sin propiedades reales. Sin embargo, hay lácteos (cómo los provenientes de California, certificados bajo el sello de Real California Milk que garantizan la calidad de los productos que consumes, para que sean 100% naturales y sin un alto proceso de tratamiento que reduzca sus propiedades benéficas.
Cuidan de tu corazón y tus dientes
Los lácteos son una fuente increíble para obtener calcio. Y además, un consumo equilibrado dentro de una alimentación, de acuerdo a los elementos del plato del buen comer, ayudan a que sus propiedades (como los péptidos y aminoácidos), actúen como barreras frente a moléculas
vinculadas a enfermedades coronarias y que regulan la glucosa de la sangre.